4.- Programaciones didácticas
El artículo 29 del Decreto 327/2010 se dedica en exclusiva a tratar el tema de las programaciones didácticas: qué deben incluir, a quien corresponde su elaboración y el órgano que puede aprobarlas. No obstante, hay que establecer unos criterios comunes que todos las áreas habrán de tener en cuenta en su elaboración, junto con las indicaciones ya expresadas en el apartado 5, dedicado a la Coordinación y concreción de los contenidos curriculares.
En el momento de la redacción de la programación se tendrán en cuenta los siguientes criterios:
- Será el fruto del trabajo en equipo coordinado por el Jefe o Jefa del Departamento pues, al tener una validez plurianual y ser prescriptivas para el profesorado que forma el Departamento, deberían evitarse las revisiones centradas en adecuar la programación a los intereses de la persona que imparte la materia durante un año.
- Partir de una reflexión previa sobre:
- Contextualización y adecuación a las necesidades y características personales de nuestro alumnado.
- La interdisciplinariedad o relación que pueden tener con otras materias de la misma área de competencias e incluso de otras áreas.
- La significación o utilidad práctica que se va a dar a los documentos elaborados.
- La validez o relevancia de los aprendizajes mínimos exigidos.
- Los requisitos mínimos de las áreas, materias o módulos encomendadas que se pedirá al alumnado para su promoción y titulación.
- La adecuación a los principios educativos que son comunes a todas las enseñanzas encomendadas al Departamento.
- Asegurar la continuidad de las enseñanzas correspondientes a una misma materia a lo largo de los distintos cursos.
- Presentar el documento en formato digital al correo direccion@iesalandalus.org, conteniendo un detallado índice y estando las páginas debidamente numeradas.
- Cumplimentar las actas de las reuniones del Departamento en que queden recogidas las aprobaciones o modificaciones de las programaciones.
Para la aplicación de la programación han de observarse los siguientes criterios:
- Contemplar una metodología rica en actividades y recursos para que el profesorado pueda optar por la más adecuada en función de las características del alumnado, de los contenidos, de los espacios disponibles y de las propias habilidades del profesorado.
Entre las actividades que todos los departamentos deben incluir tenemos: - Actividades de lectura, escritura y expresión oral.
- Uso de la biblioteca.
- Actividades ligadas a la vida cotidiana, adecuadas al entorno y que permitan adquirir las competencias clave.
- Realización de trabajos monográficos interdisciplinares y/o proyectos integrados del alumnado.
- Actividades complementarias y extraescolares.
- Planificar, para los cursos de la E.S.O., un conjunto de actividades relacionadas con el desarrollo de las competencias clave. Actividades motivadoras, vinculadas a lo cotidiano, graduadas en dificultad, con recursos materiales variados.
- En Formación Profesional:
- Acercamiento de los temas didácticos al mundo real, aportando publicaciones y documentación de productos lo más conocidos y asequibles posible.
- Desmitificando la teoría más abstracta y convirtiéndola en cosas tangibles. Es decir, analizando el punto de vista práctico de los conceptos expresados en clase.
- Planteando ejemplos de aplicación de los trabajos en clase en el mundo laboral o escolar real (o lo más cercano posible) de forma que se vaya formando la imagen, en cada alumnado, de su perfil profesional.
- Planificar actividades propias del aprendizaje dialógico: Grupos interactivos, tertulias dialógicas, etc...propio de Comunidades de Aprendizaje.
- Prestar una especial atención a las medidas tomadas para atender a la diversidad del alumnado. Es importante que siempre se tenga en cuenta en las programaciones, reflejando que medidas se adoptarán, que posibilidades de adaptación permite la programación y como se piensa realizar esta atención.
- Incluir en las programaciones el diseño y temporalización de las unidades didácticas.
- En los desarrollos de cada materia se deberán incluir referencias explícitas acerca de su contribución a aquellas competencias clave a las que se orienta en mayor medida, sobre cómo se pretende asegurar el desarrollo de las mismas a través de la definición de los objetivos y de la selección de los contenidos, y sobre cómo los criterios de evaluación han de servir de referencia para valorar el progresivo grado de su adquisición.
- Las programaciones de las enseñanzas con bajos resultados no excederán de los contenidos mínimos del currículo básico de la Educación Secundaria Obligatoria y del Bachillerato.
- Agrupaciones no siempre tradicionales (por parejas o en mesa continua de 6-8 alumnos/as).
- Planificación explícita en las programaciones y generalización del uso de TICs.
- Concretar los momentos en los que se llevarán a cabo las revisiones y mejoras si fueran necesarias.
- En formación profesional, los contenidos se basarán en los conceptos soporte relacionados según su Orden de desarrollo curricular.
Otro aspecto a tener en cuenta en la realización de las programaciones, es el denominado currículum integrado de las lenguas. Los centros bilingües elaborarán un currículo integrado de las lenguas, así como materiales para el aprendizaje integrado de contenidos y lenguas extranjeras en el marco de su proyecto educativo, que contemplará al menos los siguientes aspectos:
- Estrategias que propicien el aprendizaje de contenidos en lengua extranjera, en el marco de los objetivos curriculares establecidos con carácter general para el aprendizaje de las mismas.
- Diseño de tareas comunicativas de aprendizaje que se implementarán en el aula para contribuir a que el alumnado pueda dominar las destrezas básicas de la competencia lingüística, tanto orales como escritas, en coherencia con los objetivos de aprendizaje que aparecen relacionados para cada nivel de competencia. Para la consecución de estos objetivos se promoverá el uso del Portfolio Europeo de las Lenguas.
- Inclusión del principio de competencia lingüística del alumnado para el desarrollo de las competencias básicas.
- Incorporación de actividades comunicativas en todas las lenguas para fomentar el desarrollo de las destrezas básicas en cada una de las lenguas impartidas en el centro.
- Establecimiento de vínculos entre las distintas lenguas, unificar la terminología lingüística y los planteamientos metodológicos basados en un enfoque comunicativo.
Como ya hemos comentado anteriormente se debe considerar la evaluación como un proceso importante. Por tanto, se deben definir criterios comunes tales como:
- Precisar con claridad todos los aspectos relacionados con la evaluación del alumnado: contenidos a evaluar, instrumentos a usar, momentos en los que se lleva a cabo, y criterios de calificación.
En este punto se recomienda tener en cuenta el cuaderno de la alumna y del alumno, además de evaluar las producciones propias en ESO.
En formación profesional se evaluará el desarrollo de los resultados de aprendizaje y se tomarán los criterios de evaluación como referente del nivel aceptable de dichos resultados, incorporando además los criterios comunes de evaluación del área de Formación profesional. - Elaborar por cada materia y curso un documento base para aplicar y desarrollar la evaluación inicial del alumnado, si el Departamento así lo decide como documento de valoración nivelado.
- Confeccionar por materia y curso un sencillo documento informativo para entregar al alumnado el primer día de clase donde se resuma los aspectos relacionados con la evaluación.
En Formación profesional se considerará la observación y el análisis de los trabajos desarrollados, se utilizarán los siguientes instrumentos de evaluación:
- El trabajo en equipo.
- La investigación de los contenidos.
- La correcta utilización del material y equipos.
- Participación en clase.
- Realización y presentación de los trabajos obligatorios solicitados por el profesorado.
- La elaboración de los trabajos optativos.
- Pruebas escritas, con contenidos teóricos y prácticos.
Por último recordar que toda programación está contextualizada, por tanto es importante integrar en el currículum los planes, proyectos y programas (por ejemplo: Escuela Espacio de Paz, TIC 2.0, Bilingüismo, Igualdad, Ecoescuela, etc.), a los que el centro pertenece o en los que participa.